Tras la publicación del reportaje Balzapote: Contra la marea de la desinformación, la ambientalista y activista Jessica Swanson Santiago, fundadora y representante principal de la asociación Defensores del Medio Ambiente de Los Tuxtlas, AC (DEMATAC), se puso en contacto con este medio, para exponer algunos puntos de discrepancia sobre el enfoque que se le dio a la información recogida durante la visita a la zona de interés, tal como se relata en el reportaje citado. ( https://informantesenred.com/balzapote-contra-la-marea-de-la-desinformacion/ )
A continuación, con la admiración por la lucha ambientalista que su asociación encabeza, publicamos tal cual el documento y posterior a sus observaciones, nuestra respuesta a sus señalamientos, siempre el margen del respeto, pero aclarando que tener puntos de vista distintos no nos hace poseedores de la verdad. En informantes en red estamos comprometidos con los hechos y como tal relatamos lo que vimos y documentamos en varias visitas a la zona, y aunque como seres humanos nos preocupe y ocupe el daño que se hace a la naturaleza, exponemos también que sin pruebas no podemos hacer noticia, tampoco existe un lado bueno y un lado malo, en ambas caras de la moneda existen intereses y eso se expone en la nota. A continuación el texto enviado a nuestra redacción y su posterior respuesta por parte de esta casa editorial.
RESPUESTA DE LA REDACCIÓN
Estimada y muy admirada Jessica, aprecio tu respuesta y la publicaré con las siguientes precisiones:
1. Nadie ha dicho que la zona de explotación esté fuera del perímetro de la Reserva de la Biósfera, pero existen las exclusiones. Ayer te citaba que hay más bancos de grava en la zona y tú lo sabes porque se ha pugnado por frenar la explotación; desafortunadamente en el marco legal han contado con los permisos. Reitero que lo legal, no es lo mismo que lo justo. En la zona donde vives hay graveras contra las que has luchado, me consta, y lo he celebrado, sin embargo no han cerrado por contar con permisos de explotación, en la misma reserva federal de Ruiz Cortines hay explotación, eso ya lo sabes, incluso se permitó que se construyera el consorcio turístico Neyama, y nadie se pronunció al respecto, contaban con permisos, aún los tienen, ese es el motivo y reitero, legal no es igual a justo.
2. Esto está documentado y están los ejidatarios para confirmarlo, si gustas. Cuando en 1998 se hizo el decreto, los ejidatarios de Balzapote, donaron ejido para incluirse en la zona de reserva, igual que otras comunidades, en esa donación se estableció que al no tener tierras aprovechables para cultivo el banco recurrente seguía siendo eso, un banco para extraer basalto del cual se beneficiarían. Incongruencias y tecnicismos pero ese banco se contempló para excluirse. Al igual que en otras comunidades se pidió dispensa para actividad ganadera. De esto además, la bióloga Rosamond Ione Coates Lutes, de la estación de biología de la UNAM, nos explicó también en una entrevista de 2012, que el decreto de la reserva es conservacionista, pero no es una fiscalía, ellos no tienen poder para sancionar o frenar actividad ganadera o minera, el decreto es como un título nobiliario en todo caso, puesto que solo delimita un área que es reserva, a la autoridad que corresponde que se respete esa reserva, es a la SEMARNAT y en casos de tráfico de especies, Profepa; sin embargo es la misma SEMARNAT la que, como ya documentamos en 2014, dio el permiso. Llevamos más de 10 años haciendo reportajes sobre las afectaciones a zonas naturales, por eso aunque sea un poco sabemos sobre la situación y los tecnicismos que evitan que se pueda conservar debidamente varias zonas que son parte de la reserva.
3. La cita, debidamente entrecomillada, corresponde a la declaración de la entrevistada que da su punto de vista y refiere que no dañan nada, generalización que aunque se intérprete mal, es lo que se cita como punto de vista personal, más adelante aclaramos que la playa sigue recibiendo turismo aunque este no deje derrama económica. Por tanto esas palabras no corresponden a la editorial sino a la entrevistada de quién tenemos el audio, no es inventado.
4. El MIA es la parte que respalda el uso y aprovechamiento de suelo para minería argumentando que no hay daños considerables y que las afectaciones son, por decirlo de algún modo entendible al lector, tolerables. Repito que no es mi criterio pues no es mi función interpretar, apegado al hecho de que el MIA otorga una opinión y validación técnica para la extracción, de nueva cuenta no hay nada que señalar. Recuerda que en 2014 el MIA si señalaba zonas donde llegaban aves migratorias, por eso tenía fundamento la protesta debido a que se contemplaba habilitar nuevos bancos.
La opinión personal, no de periodista, sino de ser humano, es que se sigue dañando nuestro entorno de muchas formas y poco hacemos por ayudar a recuperarlo. La labor ejercida como periodista, fue la de narrar hechos derivado de lo que obtuve de información. Estemos o no de acuerdo, eso encontramos, por más apasionamiento que se sienta por el tema, no podemos mezclar, se volvería subjetivo. Está vez no tengo elementos para que los hechos sean distintos, la misma población, en esta ocasión no se manifiesta en contra. Respecto a los acahuales, en aquel entonces (abril de 2014 cuando se hizo el primer reportaje), nos explicaron que pese a que son zonas en las que la selva o el bosque, se recuperan con rapidez por si solos, se contemplan prácticamente, y aunque suene feo, como comodines, ya que no los consideran flora significativa, y si, lo sabemos cómo tú lo sabes, eso es lamentable. De manera que seguimos a la espera de poder entrevistar a la persona que nos referiste que habló de una especie (flora) endémica que estaría en riesgo. De poder comprobarse que está en la zona de extracción seguro la nota será distinta.
Ayer después de hablar contigo, hicimos labor periodística para corroborar la ubicación mencionada de esa especie de flora endémica, y se nos confirmó que la ubicación de 5 km., entre la desviación de La Palma-Balzapote, donde ubican la presencia de la planta que me referiste, es la zona de la reserva dónde está la estación de biología de la UNAM, lejos del banco.
Pero si logramos documentar que en la zona del banco hay esa especie, esa si sería noticia, respecto a los explosivos, mientras estuvimos ahí las veces que fuimos, nos tocó ver barrenos y percutores que obviamente hacen un ruido tremendo incluso más escandalosos que una explosión, pero no vimos detonaciones, solo narramos lo que pudimos constatar.