Luis Cresencio Sandoval, titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), sí acudió al Senado este miércoles, pero no lo hizo para comparecer y mucho menos para hablar del hackeo que sufrió la dependencia y que ha dejado al descubierto información confidencial.
Las bancadas de oposición pidieron que comparecieran los secretarios de Defensa, de Marina y el comandante de la Guardia Nacional, pero solo asistieron al recinto legislativo como compañía de la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, quien defendió la estrategia de la actual administración.
Por la mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la filtración de la información ha sido «un rotundo fracaso», aunque reconoció el hackeo a la dependencia. El Ejecutivo evitó que el titular de Sedena se pronunciara al respecto, como lo ha hecho desde hace tres semanas que se reveló la vulneración al sistema del Ejército.
Además del estado de salud del presidente, entre la información que se ha difundido está la vigilancia que se le hace a los fiscales y a los secretarios de Seguridad. Sobre los primeros, López Obrador les pidió «tener vergüenza» sobre sus escasos resultados en sus entidades y dejar el cargo.